Ciclo

Cada cierto tiempo hay un inevitable paso por la mierda, un periodo de angustia de la que no me puedo hacer el weón.

El cuerpo hecho bolsa, el cansancio se apodera de todo, la inagotable búsqueda de soledad, el paso por la tristeza, la dificultad de levantarse por la mañana. El darse cuenta que las cosas cada cierto tiempo vuelven a un puto punto de partida que queda en la parte baja del círculo y del ciclo. La parte fría, personal y que nadie ha podido entender. Lo veo a él y el estómago se aprieta, le hablo y miro sus fotos y las lágrimas pesan, el mismo weón de siempre...

Me cuesta mirar a la gente, me es fácil mirar el suelo y a la vez me cansa, me cansa todo, estoy hecho bolsa... y vuelvo por acá y ni siquiera acá hay historia, se borró todo y todo está escondido en mis archivos. Mucho de lo que aparece es simplemente lo que permanece escondido todo el tiempo mientras juego a permanecer como un miembro más de la historia de los otros y de los otros conmigo, cuando es sólo falta d pertenencia lo que me pasa. Se acerca la fecha nefasta y dolorosa. No sé qué pasará, no sé nada. Tampoco sé cómo descansar de todo y poder seguir funcionando al mismo tiempo, sólo quiero su abrazo pa calmarme a veces, pero no está ni lo estará, porque nunca estuvo si no sólo para él.

Silencio

De repente me dí cuenta que no podía separar los labios, también me dí cuenta que sólo quería soledad y silencio, luego los labios se sellaron y no lo pude separar en diez horas, donde fui capaz de decir "cuidado" y "me lleva a Tobalaba con Providencia"...

Durante horas mis neutransmisores me enmudecieron y sentí y vi todos mis fantasmas internos, huesudos, solos, fríos, asustados y principalmente una distancia inconmensurable con todo el resto, me sentía y veía una mierda, la mierda que siempre juego a no ser o a no sentir que soy.

Le di mi mano y lo abracé, no lo solté en dos horas, me metí en su chaqueta y no lo solté, no podía... si lo soltaba me quedaba solo para siempre, con frío y con una distancia que jamás se acortaría.

No podía hablar, no podía separar los labios, sólo sentia angustia... no podía hablar.

Luego de aquella vez con las neuronas hechas mierda, cada angustia la vivo con los labios pegados, no puedo hablar, aunque quiera.

Me fui quedando solo y en silencio, ya no hablo de mí, no tengo con quien, no puedo... lo único que tenía se me volvió en contra y me hizo mierda, me desangró, me quitó toda mi energía para nada, para estar solo y enmudecido, le solté la mano y ahora existe una distancia con todos que no puedo acortar, no sé cómo y sigo mudo.

De vuelta

flickr

Ufff, ha pasado ya mucho tiempo desde que dejé de escribir por acá, y mucho más desde que dejé de escribir largo o extenso por estos lados.

Probablemente soy un pendejo muy distinto desde la época en que esto comenzó, la época en que fue leído por un montón de gente y la época en que fue abandonado por su autor (yo).

Ya terminé la universidad, me enamoré profundamente, estoy solo, trabajo como persona de verdad adulta, escribí en una revista, estudio un post grado, ya no veo casi tele, me cambié de casa, he consumido drogas en abundancia, he tenido sexo irresponsable, en fin... mucha agua bajo el puente y parece que esa agua está haciendo que casi vuelva a algo parecido a lo de antes.

Parece que volveré a escribir, por lo menos me estoy abriendo a aquella posibilidad, no sé.

Dicen que esto vuelve y probablemente volverá bastante distinto a como fue abandonado.

No sé si esto lo leerá alguien, tampoco sé cómo hacer que alguien lo lea, ya las cosas en internet no funcionan de la manera en que lo hacían en aquella época. Edité muchas cosas, cambién todo el diseño y ahora me parece bien moderno, borré muchos archivos del blog, muchos post demasiado personales y que ahora no me gustaban... todo lo guardé primero en mi disco duro, no por nada había escrito 156 post y fue desde 2005 a principios de 2008, siendo el fuerte entre marzo de 2005 y agosto de 2007.

En fin, puede que las cosas anden distinto ahora, sólo me preocupa cómo hacer que alguien lea esto, ya me hice viejo y veré cómo se puede hacer.

Idiota

CORNELIUS from borntofilm on Vimeo.

Nota mental relativa a mi salud mental: Buscar una fiesta de éstas, ojalá con la fantasía sexual enmascarada, y quedar como idiota al final de noche.

Mercedes

Anoche iba caminando por una calle barrio Forestal cuando un tipo, en un Mercedes la zorra tapizado en cuero, me llama para hacerme una pregunta banal, él buscaba sexo claramente (obviamente que mi sinapsis, idiota, demoró bastante). Es raro, la sensación es extraña, te da pena, te da rabia, te da lástima, llegas a pensar "Si hubiese sido rico y joven, demás" (demás si justo vas pensando en el laptop o iPod que viste en la tarde)... no sé, es una extraña sensación. Al final piensas en "Yo no quiero llegar a eso", lo fuerte es que uno nunca sabe en qué puede terminar.

"... después seguí caminando, la avenida era inmensa, del centro de Santiago, ancha y sucia, decadente y marginal. Me eché en el suelo a descansar, al rato llegó una amiga (en verdad una conocida, amiga de una amigo y así. Esa gente que te alegra el día por 0.1 segundo, porque no sabes qué conversar después del 0.1 segundo). A cincuenta metros a mi izquierda había un vagabundo, cagado de frío. Tenía el típico look de vagabundo gringo, medio pelado, con barba sucia (esa que usa Miguel Bosé, también la llaman "barba de tres días"), abrigo negro y largo y una espalda inmensa. Pasó un tipo (o creo que era una mujer) y le dió un fajo de billetes (la vida de ese hombre había cambiado, o por lo menos el día), luego el vagabundo se paró y se fue del lugar. Pasó delante nuestro, luego de mirar mi cara me entregó el fajo (¿habrá visto en mis ojos la profundísima pena que me está acompañando ultimamente?), me dijo "Parece que tú los necesitas más", "Créame que a usted le hacen más falta, lléveselos" le dije. Miré a mi conocida y estaba sorprendida, ni cagando ella los hubiese devuelto. Al rato apareció El Canito, simpático ese weón, además de que está muy bueno. Mi conocida, amiga de El Canito (de hecho él es el nexo) saltó a sus brazos. Conversamos un rato y se fueron, abrazados (fuck! perdimos a El Canito). En la esquina del frente había un grupo de niños aspirando neoprén, eran niñitos, niñitos chicos a los que extrañamente no les faltaba el neoprén (maldito imbécil del Mercedes). Uno de ellos se acercó a mí y comenzamos a conversar, de cualquier cosa, simpático el cabro, los tratai como gente un rato y se dan fácilmente, se sienten a gusto (claro, yo le había dado la mano y todo, además con un niño chico es más fácil: les tocai la cabecita con un poco de cariño y los niños se ponen felices). El niño estaba pal pico, su voz, su cara, sucio, maloliente y todo. Me daban ganas de haber aceptado el fajo del vagabundo o el puto sexo del Mercedes pa haber ayudado a estos niños. Ahí estaba cuando llegaron los carabineros, el niño que estaba conmigo se asustó y se puso agresivo, se tiro a mi piernas (yo estaba tirado en el suelo, ahora inmovilizado) y pescó mis muñecas, sacó una cortaplumas Victorinox (¿Mercedes otra vez?) y la puso sobre mis manos, "El problema es que yo soy muy agresivo, me descontrolo... ¡O acaso creís que no me doy cuenta que te doy miedo!" me dijo. Claro mis manos y dedos estabn encrispadas, ¡Por la mierda! yo quería que el niño no sintiera rechazo de mi parte, pero no podía hacer nada (maldito sistema nervioso autónomo). El niño se asustó más mirando a los carabineros. No tuvo mejor idea que cortarme la mano con la cortaplumas."

Después del corte desperté, no sé que hora de la madrugada era. Llevo tres días durmiendo mal por sueños como éste, no voy a clase de lo cansado que ando (maldito Mercedes).